obra contemporánea

Retrato (2017) Fotografía directa c-print 70 x 90 cm

Blinde Klippe -uso del idioma alemán para referirse a Punto Ciego. Es un proyecto que incluye instalaciones, objetos y fotografías.
Tratando de entender que implicó la posibilidad primera de reproducirnos parcialmente en una imagen plana, tratando de revivir esa pulsión originaria que fundó la creencia en la imagen, e intentando conectar con las personas que posaron para esas cámaras, fui a los archivos de la Daguerrotipos SXIX. Me pregunté si es alrededor de una costumbre que se produce una imagen o si fue la creación de imágenes el primer regulador de nuestros hábitos. Retrocedí más, al surgimiento del espejo y su contribución en la construcción de nuestra identidad actual: los comienzos de una identificación que tuvo la fuerza de establecerse como representación de nosotros mismos.
A través del comportamiento actual frente a nuestro propio reflejo, Blinde Klippe evoca la latencia de aquel ritual fotográfico y cómo el mecanismo de reconocimiento frente a las imágenes involucra esta larga memoria.. La clave no es quién es el retratado, sino el funcionamiento de una imagen lanzada frente a nosotros y las directivas que de ella se activan para componernos.
Comprender un retrato es un gesto voluntarioso y conectivo, aunque la necesidad de identificación es una lucha que puede resultar frustrante, tanto como erigir una efigie con humo.

Retrato de Ro Simonassi

$780
Retrato de Ro Simonassi $780
Compra protegida
Tus datos cuidados durante toda la compra.
Cambios y devoluciones
Si no te gusta, podés cambiarlo por otro o devolverlo.

Retrato (2017) Fotografía directa c-print 70 x 90 cm

Blinde Klippe -uso del idioma alemán para referirse a Punto Ciego. Es un proyecto que incluye instalaciones, objetos y fotografías.
Tratando de entender que implicó la posibilidad primera de reproducirnos parcialmente en una imagen plana, tratando de revivir esa pulsión originaria que fundó la creencia en la imagen, e intentando conectar con las personas que posaron para esas cámaras, fui a los archivos de la Daguerrotipos SXIX. Me pregunté si es alrededor de una costumbre que se produce una imagen o si fue la creación de imágenes el primer regulador de nuestros hábitos. Retrocedí más, al surgimiento del espejo y su contribución en la construcción de nuestra identidad actual: los comienzos de una identificación que tuvo la fuerza de establecerse como representación de nosotros mismos.
A través del comportamiento actual frente a nuestro propio reflejo, Blinde Klippe evoca la latencia de aquel ritual fotográfico y cómo el mecanismo de reconocimiento frente a las imágenes involucra esta larga memoria.. La clave no es quién es el retratado, sino el funcionamiento de una imagen lanzada frente a nosotros y las directivas que de ella se activan para componernos.
Comprender un retrato es un gesto voluntarioso y conectivo, aunque la necesidad de identificación es una lucha que puede resultar frustrante, tanto como erigir una efigie con humo.